jueves, 18 de agosto de 2011

César Vallejo: "LOS HERALDOS NEGROS" Análisis.

         C. VALLEJO: "LOS HERALDOS NEGROS". Análisis

El poema pertenece al primer libro de Vallejo que lleva igual título, publicado en 1919.
Está estructurado formalmente en 17 versos agrupados en cuatro estrofas de cuatro versos y un verso libre.
El tema del poema es la fatalidad de los golpes sobre el hombre sin que él los merezca.
Vemos sucumbir a los héroes trágicos víctimas del destino, pero su alma se retira en sí misma y se halla en plena independencia. Abandona lo que le ha sido arrebatado. Sin embargo, el fin que persigue ya no le es arrancado, lo deja caer, pero no cae con él.

El poema comienza con una muestra de dolor: "Hay golpes en la vida....yo no sé" En este primer verso ya se vé el pesimismo de Vallejo, característica del sentimiento indígena que se observa en su poesía.
Ese "Yo no sé" expresa la angustia,el estupor, la extrañeza, la impotencia frente a esos golpes; al mismo tiempo, encierra una afirmación: no puede expresar cómo se sienten esos golpes. Ese terrible "Yo no sé" condensa una resolución de rebeldía; una actitud fatalista ante lo insondable del destino humano.
Ante esta situación límite el poeta se acoge al no saber como actitud existencial, mientras la angustia se engendra en el espírituresignado.
Dice Jasper que esos "golpes"son a manera de un muro con el que tropezamos y ante el que fracasamos. Todo saber se estrella ante esas piedras, más allá de las situaciones límites está el no saber. Vivenciar una situación límite lleva, por tanto, a saber del no saber.
A partir de aquí, todo el poema va a ser un intento de definir esos golpes, pero el poeta se va a quedar sólo en la definición, porque no puede explicar las causas. Esos golpes son: "golpes como del odio de Dios...Yo no sé"
El poeta no puede expresar realmente cómo son esos golpes, ni cómo se sienten, hay un elemento de incertidumbre que crea las comparaciones. La certidumbre está en que esos golpes existen, pero son inciertos porque es imposible definirlos en su cabal medida.
La idea de Dios surge de lo desconocido, de donde no le es dado llegar por la vía del sentimiento, ni de la razón. Lo inesplicable, lo que está más allá de sus fuerzas es significado por el poeta como un tributo de Dios.
"Resaca....alma"Alude al efecto de esos golpes. La resaca es la podredumbre, lo humillante, la miseria de todo lo sufrido que, como el golpe se vive nuevamente.
 Con cada golpe, todo el pasado tormentoso se aquieta en un punto del alma y el dolor nuevo se hace más quemante aún por su peso estancado y punzante.
Vallejo no busca al dolor como tema poético sino que el dolor es parte constitutiva de su existencia porque es el elemento esencias del ser humano. Para Vallejo el dolor es lo vital, porque es la vida misma.
2ª estrofa . Sigue definiendo esos golpes de la vida: "Son pocos pero son..." Nos da la magnitud y la frecuencia de esos golpes.Precisamente por darse con poca frecuencia es que se sienten mucho más el efecto de cada golpe. El uso de los puntos suspensivos son muestras del sentimiento de dolor producido por esos golpes y de la imposibilidad de expresarlo. En Vallejo la poesía viene de adentro, de la entraña misma del hombre. Cada palabra es un desprendimiento de la carne, del espíritu.
Carlos Bousoño afirma que los temas utilizados por un poeta no son nunca caprichosos. Todos ellos son las consecuencias, hacia adentro-hacia la visión del mundo- y hacia afuera-hacia la forma.

Aquí la vida es definida como sufrimiento, y el sufrimiento, a la vez, como destino.
El resto de la estrofa  está dominada por una progresiva animalidad. Esos golpes no sólo son sentidos por los hipersensibles, sino que golpean al más duro, de ahí que duelan más.El hombre, en Vallejo, padece su animalidad, la sufre.
Atila era jefe de los Hunos, caracterizado por su salvajismo y su barbarie.  La imagen de los "potros" sugiere una fuerza impetuosa.
Esos golpes "tan fuertes" de la vida son los que arrasan con todo, los que destruyen sin piedad toda una existencia dejándola sumida en los escombros de la muerte; son, tal vez, los heraldos de la Muerteun frío preanuncio de ella.
La palabra Muerteaparece escrita con mayúscula, como indicando que no se trata del final de la vida, sino de un oscuro ser que sentencia a los hombres.
Con cada golpe muere algo de nosotros mismos, porque hay una parte nuestra que, aunque se restituya, se pierde para siempre y que nunca será la misma.
La vida, tal como la ve Vallejo es irracional e irrazonable.
3ª estrofa. "Son las caídas hondas...blasfema" Esos golpes son grietas, "son las crepitaciones de algún pan que en la puerta del horno se nos quema" .
La palabra "Cristos" está en sentido metafórico, alude a la creación del alma que termina siendo sacrificada. La caída y el dolor se hacen más hondos aún porque es la caída de los hombres sobre sus realizaciones, la caída de la esperanza en el sacrificio.
El "Destino" es una presencia concreta que pisotea y destruye todo lo que de hermoso, puro y sagrado puede haber en la vida.
Aquí el "pan" se quema cuando menos se espera, en la puerta del horno. Vallejo utiliza 26 veces la palabra pan, casi todas con un sentido simbólico.La imagen es tomada de la vida humilde del hogar.

En la última estrofa el poeta va a centrarse en el hombre, en la reacción del hombre frente a esos golpes.
El poeta siente compasión y ternura infinitas por él mismo y por el hombre universal, que es objeto de su piedad fraterna.
Vallejo se compadece de la pobreza,de la falta de medios del hombre para enfrentarse a todo eso que es la vida, a esos golpes que lo llevan a la muerte.
Frente a esa palmada que lo llama sorprendiéndolo inesperadamente, el hombre sólo puede volver sus ojos locos.
Todas las culpas comienzan a doler, aquietándose con cada golpe.
El poema finaliza con el mismo verso del principio.
Se da aquí la angustia aceptada como una manera de ser hombre,de saber de no saber.
Está sólo frente al vacío; su interrogación se pierde sin eco en las profundidades del misterio.
El dolor es el núcleo sobre el que gira todo el poema. Se trata del dolor de la existencia misma, o lo que es igual, de aquel dolor que puso en tela de juicio la existencia.

PROFESORA: MIRIAM MÉNDEZ